Los estudiantes jóvenes están más conectados que nunca. Sus vidas sociales dependen cada día más de sus vidas virtuales, para bien o para mal. Los estudiantes de hoy en día no conocen el mundo sin internet, para ellos, conectar una tableta al internet es tan normal como para nosotros el conectar un televisor a la electricidad.
¿Que pasa cuando estos nuevos medios sociales como Facebook, Twitter, Instagram y hasta mensajes de texto son utilizados para intimidar, abusar o acosar a otros jóvenes? El ciberacoso es un fenómeno muy real que es un resultado del mundo en que estamos viviendo. Nuestros hijos a lo mejor no llegan a la casa con un ojo morado pero si hay otros muchachos de carne y hueso que los pueden estar abusando virtualmente.
El ciberbullying, o acoso cibernético, toma muchas formas y por eso es que cuesta trabajo identificarlo ya que no es algo que es fácil de definir y puede estar tomando parte bajo nuestras narices. Entre las formas más comunes de ciberacoso está el de publicar amenazas o cosas embarazosas en sitios web o redes sociales como Facebook, publicar videos de burlas, difundir un rumor falso a través de YouTube o sencillamente utilizar mensajes de texto o chats de grupo para lograr el mismo objetivo. También han habido casos donde los abusadores pretenden ser la víctima en el mundo virtual haciéndose pasar por ellos para continuar su ataque.
Este abuso virtual es más común de lo que pensamos y se lleva a cabo porque los muchachos que lo hacen no entienden las consecuencias muy reales de su comportamiento. Como padres, tenemos que utilizar herramientas que nos ayuden a monitorear las comunicaciones de nuestros hijos para poder protegerlos. Ya no estamos viviendo en los tiempos donde la computadora y el teléfono están en la sala de la casa y podemos monitorear lo que están haciendo. Ahora, la computadora y el teléfono son el mismo aparato y los llevamos con nosotros en los bolsillos.
Primero, habla con tu hijo o hija y explícales el problema. En muchas escuelas hay programas que hacen esto pero como padre, debes tener esta conversación. Si están actuando raro, no quieren entrar en el Internet o tratan de cerrar las ventanas del navegador cuando llegas, puede estar sucediendo algo, por lo que te recomiendo que trates de monitorear lo que están haciendo.
Hay varios programas que puedes utilizar como el que encuentras en kidlogger.net que te permite grabar invisiblemente lo que escriben en el teclado de sus computadoras y puedes instalarlo también en los teléfonos inteligentes. También existen otras opciones pagadas para monitorear su acceso y comunicaciones en las redes sociales como minormonitor.com, uknowkids.com o spectorsoft.com.
Si encuentras que tus hijos son víctimas de abuso virtual o ciberacoso, puedes encontrar más información en alertaenlinea.gov. Siempre recuerda guardar toda la evidencia posible, reportarlo a la escuela y posiblemente a las autoridades. El ciberacoso es un fenómeno real y tenemos que estar envueltos como padres para que nuestros hijos no se conviertan en perpetradores ni víctimas.
jlop says
Gracias Por la Ayuda que nos Brinda Tu Tecnoogia???