La enfermedad cardíaca no es lo que solía ser. No quiero que me mal interpreten, todavía hay mucho que preocuparse. Según el Centro para el Control y Prevención de Enfermedades o CDC por sus siglas en inglés, las enfermedades del corazón siguen siendo la principal causa de muerte en los Estados Unidos con alrededor de 600,000 personas anualmente. ¿Se puede hacer algo para reducir este número?
Estas muertes son evitables en gran medida y parece que finalmente estamos comenzando a tener éxito. De hecho, la muerte relacionada con enfermedades del corazón ha ido disminuyendo continuamente debido al conocimiento y mejores opciones de tratamiento. En el sur de La Florida, acaba de ocurrir algo que tiene la posibilidad de bajar este número aún más. Te explico.
A principios de marzo de este año, el Miami Cardiac & Vascular Institute le mostró su última inversión a la prensa y el público que me dejó verdaderamente asombrado. Esta inversión incluye una enorme expansión de $120 millones en el complejo del hospital Baptist que incluye las últimas tecnologías y las innovaciones de última generación, con la primera instalación norteamericana del nuevo Phillips Azurion. ¿Qué puede hacer esta súper máquina?
Para empezar, es mucho más que una simple máquina, es un grupo de tecnologías que trabajan juntas para ayudar a los médicos a facilitar los resultados de los procedimientos cardíacos y otros de una especialidad bastante poco conocida llamada radiología intervencionista.
¿Qué es la radiología intervencionista?
La radiología intervencionista se utiliza para la cardiología y los procedimientos donde los médicos utilizan técnicas mínimamente invasivas guiadas por imágenes en tiempo real de lo que está sucediendo en el interior del paciente, y se puede utilizar para diagnosticar y tratar enfermedades en casi todo el cuerpo. Esto es especialmente útil para la cardiología ya que los tratamientos menos invasivos y más precisos permiten a los pacientes recuperarse más rápidamente. Ponte a pensar, hace solo unos años, el único tratamiento era someterse a cirugía de corazón abierto, pero las cosas han cambiado y Azurion lo lleva a un nuevo nivel.
Entonces, ¿qué es Azurion?
El fabricante Royal Phillips lo llama una plataforma de terapia de imagen guiada de próxima generación. Es básicamente una sala configurada con una variedad de equipos que trabajan juntos para llevar a cabo los procedimientos donde la imagen es requerida. Incluye un tubo de rayos X que ofrece imágenes instantáneas sin tiempos de espera, mientras exponen al paciente a dosis de rayos X ultra bajas, manteniendo la calidad de la imagen. Está montada en un brazo móvil y funciona con un detector que muestra a los médicos una imagen de alta resolución del paciente en tiempo real.
Ahora los doctores pueden ver todo el árbol coronario en una sola imagen. Todo esto está controlado por un módulo de pantalla táctil que permite a los médicos pellizcar y ampliar las imágenes y volver a mirar a las diferentes posiciones del sistema.
Dos de estas suites de Azurion en el Miami Cardiac & Vascular Institute tienen un sistema de video donde médicos y estudiantes de distintas disciplinas pueden sentarse fuera de la sala y usar un iPad para controlar lo que están viendo. Esto permite a los médicos, especialistas y estudiantes tener una visión individualizada del procedimiento.
Las tarjetas de procedimiento son una de las maneras en que Azurion simplifica y hace más seguro el tratamiento de los pacientes. Básicamente, estas tarjetas se pueden establecer por procedimiento o por el médico y pueden automatizar y estandarizar la configuración del sistema para aumentar la coherencia de los exámenes sobre la base del procedimiento que se está llevando a cabo. Esto es importante porque evita errores de preparación.
¿Cuáles son los beneficios de Azurion y de estas innovaciones?
Al final, tener esta tecnología de imagen de última generación permite el tratamiento de enfermedades que no eran tratables previamente y crea formas más eficaces para tratar una serie de problemas cardiovasculares como coágulos de sangre de manera menos invasiva.
Usando estas tecnologías, los pacientes pueden ser vistos por un equipo multidisciplinario de expertos que no necesitan estar en la misma habitación que el paciente. Los especialistas pueden tratar desde aneurismas, trastornos del ritmo cardíaco a válvulas cardíacas defectuosas de una manera más eficaz, minimizando el riesgo para el paciente. El hecho de que los médicos están mirando dentro de los vasos sanguíneos mientras están realizando estas terapias y tratamientos me parece nada menos que increíble.
En pocas palabras
La ventaja de los procedimientos de terapia guiada por imágenes son muchas, pero la parte más importante es que permiten una recuperación más rápida para los pacientes para que puedan volver a sus vidas diarias. Procedimientos que no se podrían haber soñado hace apenas unos años, son ahora rutinarios gracias a estas tecnologías. Es bueno saber que ahora los médicos pueden tener acceso más rápido a la información y hay un alto grado de automatización que mejora la eficiencia y el tiempo de duración, lo que minimiza el riesgo. Estoy seguro de que muchas vidas serán salvadas y espero que la enfermedad cardíaca pueda ser una cosa del pasado en un futuro no muy lejano.
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